Autodiagnóstico: Una startup que le ayuda en la compra segura de autos usados

Aproximadamente más de 400 mil vehículos usados se compran y venden en el país, según la Asociación Automotriz del Perú. A esta cantidad, se suman cada año 170 mil autos nuevos generando un mayor embotellamiento vehicular en nuestra ciudad.

Ante esto, Autodiagnóstico, la startup ganadora de la tercera generación de Startup Perú, nació como un servicio de inspección mecánica a domicilio que determina a través de un análisis si un vehículo en venta es bueno, aceptable, malo o estropeado.

Así, esta propuesta que solo opera en Lima Metropolitana, busca garantizar a sus clientes una compra segura e indirectamente evita el uso de vehículos en mal estado. En palabras de Lazlo Belmont, CEO de Autodiagnóstico, son “como una especie de detectives mecánicos a domicilio”.

Mejoras

Sin embargo, en un principio la falta de asesoría y presupuesto originaron que enfocaran mal su publicidad y desarrollaran plataformas digitales que no se complementaban con el concepto de su negocio.

“Cuando iniciamos, en el 2015, ofrecíamos menos de 30 servicios al mes porque la empresa era nueva y tenía poca credibilidad. Estábamos utilizando el presupuesto en áreas que no nos convenían”, comentó Lazlo Belmont.

Otra valla que encararon sus fundadores fue el mal diseño de su portal web lo cual ocasionó que no conozcan qué cibernautas ingresaban y desde qué portal o red social lo hacían.

“Habían veces en que teníamos alto tráfico en nuestra página, pero nos dábamos cuenta que estas personas interactuaban muy poco lo cual evidenciaba que la publicidad estaba en portales web que no nos convenían”, dijo.

El proceso de atención también presentaba deficiencias que fueron resueltas gracias al desarrollo de una aplicación que facilita a los mecánicos la rápida ejecución del informe del estado del vehículo.

Según Lazlo Belmont, este cambio permitió que se pueda atender no solo de 3 a 7 autos al día sino hasta 10 vehículos.

“El proceso de atención inicia con el contacto del cliente interesado en comprar un auto usado para que nosotros le informemos qué define el precio, es decir, la marca, el modelo y el distrito”, informó.

Ahora la mayoría de sus clientes no están presentes durante el proceso de inspección ya que confían en los servicios de Autodiagnóstico.

“Después de analizar el estado del auto, nuestro equipo de mecánicos envían un informe detallado explicando las deficiencias del vehículo y sugieren soluciones” comentó.

Los creadores de Autodiagnóstico declararon que el dinero obtenido por parte del Ministerio de Producción también les ayudó a evaluar su modelo de negocio y campaña comercial a través de empresas especializadas.

“Descubrimos que no estábamos empleando de manera correcta el marketing digital, lo cual está mal porque el tipo de negocio que encabezamos se mueve gracias a eso. Ahora la página web está mucho más orientada al comprador”, afirmó.

Servicios

Actualmente Autodiagnóstico ofrece dos tipos de inspecciones: simple y completa. La primera está dirigida a los usuarios que desean conocer datos específicos del auto que quieren comprar y el segundo para los que quieren un asesoramiento más especializado.

“Gracias a los cambios que hemos realizado estamos realizando más de 70 servicios al mes lo cual involucra más del 100% de crecimiento en un año contra otro”, reveló su fundador.

Otros logros que consiguieron a consecuencia de los cambios efectuados con los fondos que ganaron a través del Ministerio de Producción son las alianzas con portales web y empresas del rubro donde se desarrollan.

“Tenemos un convenio con Neoautos, una portal web de venta de vehículos usados en el Perú, y con una empresa de subasta de activos fijos en desuso, es decir, una compañía con un portal de venta de vehículos cuyos clientes nos llaman para conocer si están en buen estado”, agregó.

Finalmente manifestó que el 98% de sus clientes declararon que se sienten satisfechos con el servicio de Autodiagnóstico y que más del 30% de sus servicios se realizan por recomendaciones de clientes antiguos.

(Por Nicol León Arge)