Gobierno aceptó la renuncia de Gisella Orjeda como presidenta de CONCYTEC

El Gobierno aceptó hoy la renuncia de Gisella Orjeda Fernández a la presidencia del Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (CONCYTEC), y encargó dicha responsabilidad a Anmary Guisela Narciso Salazar. La resolución suprema publicada en El Peruano lleva la firma del presidente Pedro Pablo Kuczynski y del presidente del Consejo de Ministros, Fernando Zavala.

Orjeda se venía desempeñando en el cargo desde el 2012 con el gobierno de Humala y fue ratificada por el actual gobierno. En su gestión logró elevar el presupuesto de Concytec desde S/ 15 millones anuales hasta más de S/ 120 millones.

En enero del 2015 en entrevista con Gan@Más dijo: “El Concytec se ha reforzado para hacer la tarea de transformar el país utilizando conocimiento. Recuerdo que cuando recién asumí el cargo, el presidente de la República, Ollanta Humala, me preguntó si Concytec podría inyectar S/. 1,000 millones al año a la economía y le dije que no porque no teníamos las capacidades internas de preparar nuevos instrumentos y tampoco teníamos sufi cientes investigadores e instituciones que estén a la altura, pero ahora sí creo que podemos manejar esa cantidad de recursos”.

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En todo este tiempo, Orjeda trabajó sobre la política que respalda a la institución que lideró a través de estrategias y programas transversales para mejorar la competitividad de las empresas y el bienestar de la sociedad civil.

En enero de este año el Ejecutivo aprobó la implementación del Proyecto de Mejoramiento y Ampliación de los Servicios del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (SINACYT), el cual demandará una inversión de 100 millones de dólares, de los cuales, 45 millones de dólares serán otorgados en crédito por el Banco Mundial. Este proyecto elaborado por CONCYTEC busca mejorar el desempeño del SINACYT con la finalidad de lograr un desarrollo sostenible del país basado en el conocimiento.

Denuncia

Desde el año pasado la gestión de Orjeda se vio envuelta con la denuncia de algunos congresistas por presunta responsabilidad administrativa porque la entidad subvencionó proyectos de investigación a cargo del biólogo Carlos Merino Méndez, quien era su socio. En octubre del 2016, en declaraciones a Perú 21, Orjeda rechazó haber incurrido en conflicto de interés, dijo que Carlos Merino es un investigador independiente a quien no se le puede negar que concurse para recibir este tipo de fondos.

En abril del 2017, Perú 21 también informó que de acuerdo con un informe de auditoría de la Contraloría, emitido el 28 de febrero, se detectó que Orjeda incurrió “en presunta responsabilidad administrativa funcional” al elegir “y priorizar” como ganadores de subvenciones públicas los proyectos científicos que tenían a sus socios comerciales como investigadores.