APRENDIENDO A SER FELIZ
1 Julio, 2012 / 1:45 pm
Alguna vez se ha preguntado ¿por qué no nos enseñan a ser felices?
En las universidades se enseña casi de todo, pero no hay cursos sobre felicidad. En un mundo tan competitivo como este, en el que los problemas de depresión y estrés saltan a la vista, se hace necesario replantear esta posibilidad y felizmente al menos una universidad ya lo está enseñando y es nada menos que Harvard, una de las más importantes y prestigiosas universidades del mundo.
En el 2004, la universidad de Harvard, a través de un estudio, descubrió que 4 de cada 5 estudiantes sufría algún tipo de depresión, aunque no quisieran dar a notarlo y se escudaran en sus aspiraciones y “vida ocupada”. Ante esta situación, los directivos empezaron a buscar mecanismos y maneras de revertir esta situación, hasta que, en el 2006, encargaron al profesor Shawn Achor la creación de un nuevo curso totalmente atípico para una universidad como esta: el curso de la felicidad.
El resultado fue sorprendente y contra todo pronóstico, sobre todo porque en Harvard, los alumnos se jactan de ser autosuficientes, con un coeficiente intelectual bastante alto y con una idea de la competitividad muy arraigada. Nadie imaginaría que estos estudiantes pudieran tener interés o si lo tenían, demostrarlo, por un curso de la felicidad. Sin embargo, este curso es de los más famosos de Harvard y desde que se creó, uno de cada seis estudiantes lo toma, convirtiéndolo en uno de los más exitosos de esta universidad.
El profesor Shawn Achor, quien ya viene trabajando más de 13 años en Harvard, ha realizado importantes estudios relacionados con la felicidad y la psicología positiva y ha servido de modelo para que otros catedráticos opten por plantear cursos similares.
Es así, que el profesor israelí, Tal Ben Shahar, quien durante 10 años estudió la psicología positiva y se graduó como psicólogo y filósofo, en Harvard, hoy dicta charlas sobre felicidad por todo el mundo, incluso tiene un curso sobre felicidad por internet, al cual acuden miles de alumnos. Entre las materias que incluye, están: autoestima, empatía, amistad, amor, los logros personales, la creatividad, la música, la espiritualidad y el humor.
Para Shahar, quien además de catedrático de Harvard es coach de bienestar, una de las especialidades del Coaching personal, la psicología positiva se centra en la felicidad, la autoestima y la motivación, lo cual influye en el ánimo de las personas ayudando a que consigan el éxito y a que encaren la vida con alegría. “El objetivo de mi clase es crear este puente, unir la accesibilidad y la diversión de la autoayuda con la rigurosidad y la sustancia de la academia”, asegura. Y es un convencido de que se puede ser feliz en cualquier circunstancia y bajo cualquier estrato social, todo depende de uno y todo está dentro de uno mismo. “La principal lección que aprenden mis alumnos es que la felicidad está en nuestro estado de ánimo, hay que aprender a apreciar la vida. Es necesario aprender el valor de la música, la espiritualidad y las relaciones interpersonales porque le otorgan valor y sentido a la vida”.
El objetivo de este tipo de cursos no solo es lograr que las personas superen la depresión y negatividad, sino que cuenten con las herramientas necesarias para auto fortalecerse en el positivismo hasta encontrar, por sí mismos, el camino para ser feliz.
De acuerdo a la revista Business Week, los cursos sobre felicidad dictados en Harvard, son los más exitosos en la historia de esta prestigiosa universidad. Asimismo, se estima que ya hay cerca de 200 cursos que se dictan, con relación al tema de la felicidad, en Estados Unidos, lo cual demuestra la imperante necesidad por aprender o reaprender a ser felices.
3 pilares para alcanzar la felicidad, según Tal Ben Shahar
• Permiso para ser humanos: en el mundo existen sólo dos clases de personas que no sienten tristeza, ansiedad, disconformidad o angustia, y esas son los psicópatas y la gente muerta. Sin embargo, es necesario darse el permiso para sentir estas emociones que son parte de la vida y naturaleza humana, si no lo hacemos, éstas se intensifican e interiorizan. De esta forma, y con la frase “permiso para ser humanos” Ben-Shahar enfatiza en que debemos dejar que las emociones malas fluyan, para así dar paso a unas mejores. Además, agrega, que el mal de estos tiempos es el estrés, el cual se soluciona principalmente con dos pequeños consejos: El primero tiene que ver con la sensación de tener tiempo para hacer cosas que nos gusta o estar con la gente que queremos, y para alcanzar ese tiempo hay que saber parar. De esto, el principal elemento predictivo para saber si una persona es feliz, es saber cuánto tiempo pasa con la gente que quiere. El segundo se basa en practicar la capacidad de darnos pequeños recreos, durante el día, la semana o el mes. Esto es vital para poder seguir adelante, señala Tal Ben-Shahar. “Necesitamos recrearnos para poder seguir creando”, afirma.
• Conexión Cuerpo y Mente: El segundo pilar tiene que ver con el ejercicio y la forma en que ayuda a ganar confianza, actitud, y felicidad. Es necesario ejercitarse un par de veces a la semana, pues la actividad física ayuda a que la gente se dé cuenta que ellos tienen el control de su felicidad. Otra actividad recomendada es la meditación, el yoga y la respiración. Pero no una respiración común y corriente, sino una profunda, que realmente ayude a bajar los niveles de ansiedad. Aprender a respirar con calma tiene que ver con darnos tiempo y permitirnos ser humanos, asegura.
• Gratitud: Todo ser humano debe estar agradecido por todas las cosas simples de la vida que reciba. Como ejercicio, Ben Shahar nos recomienda que escribamos a diario las cinco cosas más importantes por las que estamos agradecidos. Este acto es bueno para darnos cuenta de las cosas que tenemos en el presente y no valorarlas sólo cuando las perdemos, afirma.
Vea Tambien: