Personajes

Susana Villarán: Quiero ganar en la cancha y ahí le juego a Castañeda

Gan@Más

Redacción digital

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2 Septiembre, 2014 / 11:39 pm

Sin duda Susana Villarán es una mujer polémica, amada por muchos, odiada por otros, quizás más por el sexo masculino (sin ánimo de ser sexista o feminista) que la ve como una adversaria agresiva y aguerrida, capaz de lograr grandes cambios y reformas…los que Lima necesita, y capaz de hacerle una pelea limpia y justa a cualquier oponente. Eso en una sociedad machista, como la nuestra, es algo que todavía se combate.

Es cierto que su mandato no ha sido el país de las maravillas como ella misma dice, sin embargo ha realizado grandes gestiones como la reubicación de los comerciantes de La Parada hacia el nuevo mercado mayorista de Santa Anita, la modernización del transporte o la culminación del tramo uno de la Costa Verde San Miguel-Magdalena, centros de salud, nuevas pistas, etc.

Aunque, como ella misma señala, la prensa y los políticos adversarios se encargan de sacar a la luz, con más fuerza, los errores cometidos durante el logro de esas obras, en especial con el túnel de Santa Rosa que se desplomó dos veces y fue la dificultad más grande que tuvo que enfrentar.

Susana siempre está dispuesta al diálogo, abierto, sincero, sin tapujos, pero sobre todo sin tiempos. “Puedo ir a un debate abierto sin ningún problema, pero que no me den 2 minutos para contestar una pregunta. En 2 minutos no puedes decir mucho”, dijo hoy en la noche, en el marco del inicio del Ciclo de Candidatos que viene organizando la revista Politai, de la universidad Católica, con motivo de las próximas elecciones, y en el que Susana mostró la mejor disposición aceptando tomarse fotos con los universitarios que la escucharon y simpatizan con ella.

Continuar con las reformas

Luego de la ponencia, Gan@Más conversó en exclusiva con Susana Villarán y entre otras cosas señaló que está dispuesta a ir a este segundo periodo para culminar las grandes reformas que se están haciendo. “Queremos continuar con las reformas y las grandes  inversiones en infraestructura que están dando a nuestra ciudad mayor competitividad y productividad, pero también mayor justicia que es algo fundamental en una sociedad tan desigual como la limeña”.

Comentó estar muy confiada con los movimientos en términos de cifras electorales y dijo que todo puede suceder en lo que queda de la campaña. “Nosotros más que las encuestas vemos las cuestas que hay que subir y estamos subiéndolas haciendo una campaña de propuestas, de mostrar las obras y de decirle a la gente cuál es el sentido de las reformas y por qué hay que continuarlas”.

Sobre los puntos fundamentales que tiene que cubrir, de llegar a ser elegida, dijo que lo primero es continuar y culminar por completo la reforma del transporte público de pasajeros, de buses, de transporte de carga, las peatonalizaciones de Lima, fundamentales para la movilidad peatonal.

En segundo lugar todas las obras que le den mayor competitividad a Lima en términos de infraestructura; y en tercer lugar lo que es el borde urbano de la ciudad y la transformación de los anillos que hoy se llaman anillos de pobreza y que tienen que integrarse a través de Barrio Mío.

En relación al tema urbanístico, Susana dijo “el plan urbano de Lima ya está, lo vamos a dejar entregado ahora pero lo que sigue es aplicarlo en términos de ver cuál va a ser la zona industrial, la de crecimiento residencial que ya está definiéndose en este momento y será muy importante que para el próximo periodo ese plan no quede en letra muerta sino que se aplique realmente para un crecimiento ordenado de Lima al 2035”.

En la cancha

También habló del JNE y que tiene que resolver pronto el tema de Castañeda. Agregó que ella siempre ha acatado las decisiones del jurado aunque a veces no hayan sido positivas como la revocatoria donde se tuvieron muchas arbitrariedades. “Pero la verdad, yo quiero ganar en la cancha y en la cancha le juego a Castañeda”, puntualizó.

Para Susana hay dos clases de políticos, los que llegan al poder y quieren quedarse allí pensando en lo que les conviene y los que piensan en lo que necesita y le conviene a la ciudad o al país aunque tengan que pagar un precio por ello. “Yo estoy en ese segundo grupo y no soy la única, felizmente”.