“El Congreso no debe permitir que el Banco de la Nación se convierta en banca múltiple”

“¿Para qué quieren un Banco de la Nación haciendo funciones de banca múltiple? Creo yo para regalar la plata de todos los peruanos”, dijo Jorge Solís, Presidente de Directorio de Caja Huancayo, al referirse al interés del Ejecutivo por lograr que el Banco de la Nación se convierta en una banca múltiple.

En conferencia de prensa dada por esta entidad microfinanciera, en un céntrico hotel de San Isidro, Solís refirió que no se ha escuchado ni a la SBS, BCR o MEF que opinaron en contra de que el Banco de la Nación obtenga facultades para ofrecer créditos, tarjetas, etc, y convertirse en banca múltiple. “Pese a ello y haciendo oídos sordos, el Ejecutivo está solicitando facultades al congreso para aprobar esta ley cuando el Banco de la Nación no tiene capacidad operativa ni siquiera para colocar sus bonos que fueron colocados por los bancos y las entidades microfinancieras”.

Solís agregó que el estado debería fondear a las entidades microfinancieras con créditos baratos que se traducirían también en créditos baratos a las mypes. “El mensaje que queremos dejar, desde Caja Huancayo, es que este tema debe debatirse. El congreso no debe otorgar facultades ya que esta ley fue observada y quieren meter por la ventana al Banco de la Nación, como banco múltiple, pero debe debatirse y discutirse en el congreso, invitando a los actores de las entidades financieras y microfinancieras, así como a los representantes que están promoviendo esta ley”.

El Banco de la Nación, al ser una entidad estatal y convertirse en banca múltiple, trastoca toda la estructura financiera del país porque puede promover una cultura de no pago, como se vio con otras entidades como Agrobanco o el Banco de Materiales, que fueron un fracaso, explicó Solís. “El Banco de la Nación no tiene fondos de depósito, no sabe de intermediación financiera, no cuenta con la suficiente capacidad técnica, de recursos, etc, para cubrir los servicios de banca múltiple y lo que debería seguir siendo es un banco de segundo piso que nos dé créditos baratos que a su vez nosotros traslademos a las mypes. Es trastocar la Política Nacional de Inclusión Financiera cuando lo que se debe hacer es crear un ecosistema que genere círculos virtuosos y que pasa por fortalecer a las entidades microfinancieras con apalancamiento”.

Cifras de las entidades microfinancieras

Solís mencionó que las entidades microfinancieras y fundamentalmente las cajas han venido haciendo inclusión financiera (IF) desde su nacimiento. Es así que hoy el Perú ocupa el 1er lugar en IF en Latinoamérica y el Caribe, además de otras economías del mundo ya que la IF se mide en 88 economías del mundo.

En ese sentido, agregó que son 40 las entidades microfinancieras en el país, actualmente, supervisadas por la SBS, sin contar a las cooperativas. “Solo las microfinancieras tenemos 2444 agencias, 4 veces más que la cobertura del Banco de la Nación. Hacemos microcréditos y contamos con 13137 cajeros; 115,953 agentes corresponsales, 10 veces más cobertura que el Banco de la Nación y estamos en todos los rincones del país, incluso donde no está el banco estatal”.

Las entidades microfinancieras han logrado 44 199 805 millones en colocaciones, y de este total, el 60% destinado a las mypes, informales, ambulantes, emprendedores, etc. Tienen 17 708 817 millones de clientes deudores, casi la mitad de la población nacional. Captaciones o ahorros por 41 251 370 millones y un total de 11 118 281 millones de clientes.

En cuanto a los niveles de IF que se miden por el impacto en los adultos mayores, las entidades microfinancieras dan acceso al 39% de esta población a créditos y al 46% a ahorros. “El año pasado quebraron 3 millones 500 mil pymes que no tuvieron auxilio y hoy miles de mypes están languideciendo y se necesita un programa de rescate por parte del gobierno y no crear este banco como nuevo negocio ya que necesitaría de demasiados recursos en asesores de campo, agencias nuevas, tecnología, etc, que son recursos de todos los peruanos y no se garantizaría la continuidad de la cultura de pago”.