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Beneficios más atractivos para la retención e incorporación de talento

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Redacción digital

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2 Diciembre, 2015 / 11:58 am

Por Alejandro Robatti
Director HR-In

El sueldo no es el único incentivo para atraer o retener el talento. Hoy en día entran en juego éste y otros factores que combinados de la manera adecuada conforman una oferta integral para la atracción y retención del talento, al que llamamos “propuesta de valor”.

1.- Bonos: Un salario competitivo es importante, pero debe complementarse con pagos variables que “impulse” el desempeño del trabajador. Un sistema de pago variable bien diseñado, en donde el colaborador perciba que la empresa comparte el éxito es un poderoso motivador.

2. Seguro de salud: Una buena cobertura de salud, que incorpore incluso a los padres puede ser más efectivo que un aumento de sueldo.

3.- Tiempo flexible: esta es una de las mejores prácticas para mejorar el balance entre la vida laboral y personal ya que permite atender demandas personales o familiares. Tiene el aliciente además de no implicar un costo para la empresa. Por ejemplo, permitir que los colaboradores ingresen una hora después del horario “oficial” de forma que puedan llevar a sus hijos al colegio (el horario de salida se correría también una hora).

4.- Alimentación: bien sea subvencionando al empleado parte de su costo o incorporando los sistemas de vales de alimentos, que están más dirigidos hacia la familia. Estos últimos tienen además una importante ventaja en costo para la empresa.

5.- Capacitación /Desarrollo: Si bien muchos no lo consideran un beneficio, siendo tan pocas las empresas en nuestro país que lo otorgan, en la práctica lo es. Se trata aumentar la empleabilidad de los trabajadores de forma que perciban que su valor (“marca”) profesional crece, mediante el desarrollo de nuevas habilidades y competencias. Cuando se combina con un sistema de promociones o “carrera” que a través de esta capacitación les permita acceder a nuevos puestos se convierte en un poderoso generador de compromiso (“engagement”) que se traduce en menor rotación y consecuentemente, menores costos de reposición.